Ambulancias y legislación EN 1789: las normas europeas de referencia actualizadas a 2020

Asunto: ¿Sabías que los ajustes en la norma EN 1789 suelen ocurrir cada siete años?
La última ha sido Norma EN1789/2020
Esta norma está basada en un elemento fundamental del transporte en ambulancia.
Tiene prioridad la protección y la seguridad de los pacientes e intervencionistas durante el transporte.

Normativas


Norma EN 1789 en Europa

El color de las ambulancias será amarillo azufre con código de color RAL 1016 y una estrella de la vida en los laterales.

Así serán en toda Europa las ambulancias para su reconocimiento inmediato por todos los ciudadanos de la UE.

Así lo establece la norma EN 1789:2020 para referenciar al servicio de rescate en los Países europeos.

El color amarillo se alterna con un verde "a damas o verde damero" para su inmediato reconocimiento, esto según la categoría de la ambulancia

Por otra parte, la estrella de la vida es el símbolo de ayuda a nivel internacional. Está presente en todas las ambulancias de todos los países no siendo así el color de las ambulancias que veremos a continuación.

Transposición de la norma CEN 1789:2020 en Países europeos

La nomenclatura CEN significa (Comité Europeo de Normalización)

Este comité es una agencia acreditada por la UE y formada por organismos nacionales de normalización.
Italia aún funciona con la normativa anterior (Decreto Ministerial 553 de 1987) razón por la que el color de las ambulancias sigue siendo blanco. El amarillo como color de ambulancias impera en toda Europa salvo en Escocia dónde las ambulancias son blancas, y en Francia donde el color es diferente según las categorías A, B o C.

La clasificación de las ambulancias en Europa según norma EN 1789:

  • Tipo A, ambulancia para el transporte de pacientes no graves, siendo A1 (paciente único) o A2 (para el transporte colectivo de dos o más pacientes)
  • Tipo B, ambulancia asistencial de soporte vital básico para primeros auxilios, para el servicio de emergencia y para el transporte.
  • Tipo C, Unidad de soporte vital avanzado, unidad móvil de cuidados intensivos para el transporte, tratamiento avanzado y seguimiento de pacientes graves; este tipo también se denomina centro de reanimación móvil.


Las ambulancias francesas


En Francia, esta categorización difiere las abreviaturas alfabéticas: Las ambulancias anteriores pertenecen a la categoría A, diferenciados por tipo (tipo B; tipo C). A estos se suman otras dos categorías: la C para ambulancias privadas para transporte sanitario no grave; la D para vehículos sanitarios ligeros (VSL) destinados al transporte de pacientes sentados.

En concreto, se clasifican:

A1 tipo B para vehículos de rescate y asistencia a las víctimas (Véhicule de Secours et d’Assistance aux Victimes -VSAV) de los bomberos;
los vehículos de primeros auxilios para personas (Véhicule de Premiers Secours à Personnes-VPSP) son de categoría A2 tipo B, equipados con material médico que se necesita para prestar ayuda para reforzar la acción de los médicos de emergencia del SAMU/SMUR o del Vigili de fuego. Este tipo de vehículo es utilizado por la Cruz Roja Francesa, la Protección Civil, la Cruz Blanca y otras unidades de primeros auxilios;

La categoría A1 tipo C incluye ambulancias SAMU (servicio de primeros auxilios) y SMUR (servicio móvil de emergencia y reanimación), totalmente equipadas desde el punto de vista sanitario y con la presencia obligatoria de médico y enfermera.

Las ambulancias en Bélgica

En Bélgica, en cambio, se utiliza la categorización básica: las A son ambulancias de transporte secundario y son de color blanco con una franja reflectante amarilla con cuadrados verdes, mientras que las ambulancias de rescate de emergencia son de categoría B, reconocibles por ser completamente amarillas (siempre con banda horizontal a los lados con cuadrados verdes).

Las ambulancias en Italia

En Italia, las abreviaturas A y B se invierten al definir las categorías de ambulancias (A = rescate; B = transporte de enfermos). La C identifica los centros de reanimación móviles.

Se pone mayor énfasis en la codificación basada en la tripulación y en la instrumentación. Se definen:

  • MSB, los vehículos de salvamento básicos con solo rescatistas con ayudas básicas a bordo;
  • MSI, los vehículos de ayuda intermedia con la presencia de una enfermera;
  • MSA, vehículos de rescate avanzados con enfermera y médico a bordo.


Equipamiento y estrategia de intervención


La ambulancia de rescate, según la legislación europea, debe tener el compartimiento de conducción separado del compartimiento de atrás, dedicado a la atención sanitaria. El equipamiento del compartimento sanitario incluye: material de primeros auxilios, kit de reanimación, instrumentos para oxigenoterapia, equipos de protección individual (EPI), herramientas básicas de diagnóstico, dispositivos de inmovilización atraumática y equipamientos para el transporte de pacientes.

El equipamiento de una ambulancia puede variar según se adopte una estrategia de intervención «scoop and run» (recoger y llevar al paciente al hospital lo más rápido posible) o un modelo «stay and play» (en el que el objetivo es estabilizar el paciente antes de trasladarlo al hospital), lo que implica un equipamiento instrumental más rico.

El primer modelo se utiliza principalmente en el mundo anglosajón, mientras que el segundo está más extendido en los sistemas de rescate franceses, alemanes y centroeuropeos.

Últimamente, se está consolidando un modelo híbrido llamado “scoop and play”, es decir, realizo maniobras al paciente mientras voy rápidamente al hospital.

Esta tendencia confirma la importancia de disponer de vehículos en el territorio de acuerdo con las indicaciones de la legislación europea que se aprobó en octubre de 2020 y que seguirá vigente durante los próximos cinco años.

La bancada es un elemento esencial dentro del compartimento sanitario. Primero, es el punto de interfaz entre el vehículo y el paciente. Por lo tanto, los soportes deben cumplir ciertas características, por ejemplo, no deben tener bordes afilados, deben ser capaces de soportar cargas de hasta 220 kg y permitir la carga y descarga de la camilla incluso en el caso de un peso de 300 kg.

En segundo lugar, teniendo una masa y dimensiones significativas, en caso de accidente, pueden constituir un peligro real para el paciente y los operadores.

Por esta razón, las bancadas también deben haber superado las pruebas dinámicas relacionadas con el anclaje al vehículo y estar certificados 10 g por un organismo notificado. En ausencia de certificados válidos, existe un grave riesgo para la seguridad de los ocupantes dentro de la ambulancia.

¡Es fácil imaginar lo que sucedería si el anclaje de la bancada o la bancada misma sí cediera debido a un impacto!

Así que tenga cuidado, no es suficiente que la camilla tenga fijaciones certificadas, también la bancada debe estar certificada

La prueba dinámica de 10 g, prevista de las normativas antes mencionadas, consiste en probar que todo el equipo a bordo de la ambulancia y los sistemas de fijación relativos pueden soportar aceleraciones de hasta 10 g (es decir, 10 veces la fuerza de gravedad) en todas las direcciones, tanto longitudinalmente como lateralmente.

Para garantizar la seguridad de los miembros de la tripulación y del paciente a bordo, es esencial que los dispositivos médicos, equipos u objetos comúnmente transportados a bordo de una ambulancia estén anclados en su lugar y no se muevan, para evitar que se convertan en balas mortales en caso de accidente.

Todas las bancadas STEM son probadas 10 g. Además, incluso si no es requerido por las normativas actuales, muchas bancadas STEM y el sistema Sherpa se prueban hasta 20 g para garantizar una mayor seguridad para los pacientes y operadores en caso de accidente

El anexo B de la norma EN 1865-5 se refiere a las pruebas de manejo de las bancadas y define las fuerzas máximas que pueden aplicarse manualmente para mover la bancada lateralmente, hacia adelante o hacia atrás. Para hacer productos de calidad, es importante diseñar equipos que tengan en cuenta las características para reducir el esfuerzo físico del personal que los utiliza y que son útiles durante el desempeño de sus actividades.

Todas las bancadas STEM cumplen con estos requisitos, de acuerdo con la norma europea EN 1865-5 + Anexo B. Además, STEM ha desarrollado Sherpa, un sistema de carga y descarga controlado electrónicamente para camillas, que evita que la camilla caiga al suelo si la pata no se abre durante la descarga y elimina el esfuerzo físico que el operador debe hacer durante la carga.

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